El secreto del ‘big data’ son las ‘big questions’

junio 24th, 2013 by genisroca

15000_sideEn la actividad digital todo genera un dato. Las tarjetas de crédito indican dónde gastamos, en qué tiendas de qué ciudades, en qué conceptos y con qué importes. Los teléfonos móviles indican dónde estamos y con quien hablamos. Las redes sociales saben cuáles son nuestras amistades y cuáles nuestros grupos de interés. Nuestros proveedores de Internet saben qué webs visitamos. La tarjeta de fidelización del supermercado sabe qué productos preferimos y con que frecuencia los reponemos. Datos. Datos. Datos. Una ingente cantidad de datos que ahora con la digitalización son más trazables, almacenables y gestionables que nunca.

Entre tantos datos hay mucha información, información clave para el negocio. Tendencias y correlaciones, causas y efectos, preferencias de consumidores y pautas de conducta. Ya hay quien valora a las empresas en función de sus bases de datos y del potencial de éstas para el desarrollo de negocio. Sin el valor de los datos no se entiende el verdadero potencial de Google, Apple, Amazon o Facebook. Pero tampoco el de Telefónica, BBVA, Carrefour o Endesa.

En este contexto hay quien se obsesiona por coleccionar y procesar datos, y se detecta ya una cierta tendencia a la parálisis por el análisis. Millones de datos, increíbles esfuerzos para su proceso, y una cierta incapacidad para obtener información realmente útil. Mucha estadística descriptiva pero pocas inferencias útiles. Y es que pese a la llegada de la digitalización nada ha cambiado: no obtiene respuestas quién posee los datos, sino quién sabe hacer las preguntas.

Aprendí esta obviedad hace 25 años cuando ejercía de arqueólogo (sí, esa es mi formación de base) y la aprendí trabajando con paleontólogos. Cada vez que en un yacimiento prehistórico encontrábamos el cráneo de un homínido los paleontólogos eran quienes intentaban explicarnos en qué momento de la evolución humana nos hallábamos, y para ello se dedicaban a analizar el resto fósil e intentaban extraer de él todos los datos posibles. Medían la longitud, anchura y espesor de cada pieza, el grosor de las paredes craneales, el perímetro, el detalle de cada pieza molar… se dibujaba todo al milímetro. Cientos de medidas, miles de datos… pero poca información. Todo cambió cuando por fin los paleontólogos se enfrentaron a los restos fósiles con ánimo de hacerles preguntas, en lugar de con ánimo de obtener datos de ellos.

Durante décadas se había medido el tamaño de todos los dientes, y se habían dibujado minuciosamente uno a uno. Y lo mismo con la mandíbula. Hasta que un día alguien preguntó: ¿Este homínido era carnívoro o herbívoro?. Y ante esa pregunta el dato útil fue el ángulo de desgaste de los molares (cuya inclinación variaba claramente entre una dieta u otra), así como el grosor de la mandíbula (ya que una requería mayor musculatura facial que la otra). Dos simples datos: ángulo de desgaste molar y grosor de la mandíbula daban la respuesta a una gran pregunta. Hasta la fecha se habían recolectado cientos de datos, y nunca se había obtenido una respuesta tan útil. Y para colmo, el ángulo de desgaste molar es un dato que nunca nadie había registrado antes de hacer esta pregunta.

Sin preguntas siempre procesaremos más datos de los necesarios, y encima no tendremos la certeza de estar trabajando con los datos correctos. El Big Data puede ser un Big Fail si no se orienta a responder preguntas concretas. Y esas preguntas concretas sólo se pueden plantear desde un profundo conocimiento del negocio y de sus retos.

Ahora que ya tenemos la capacidad de recopilar datos y procesarlos, deberemos demostrar la capacidad de hacer las preguntas pertinentes. Y eso no va a depender de nuestra capacidad tecnológica, sino de nuestra correcta comprensión de los retos del negocio.

El secreto del ‘big data’ son las ‘big questions’.


8 Responses to “El secreto del ‘big data’ son las ‘big questions’”

Feed for this Entry Trackback Address
  1. 1

    Blanca Oraa Moyua

    Así de simple.

  2. 2

    Ramón

    Te felicito. NO has podido ser más claro. Aunque siempre habrá algún descerebrado que pregunte imposibles por lo menos sabremos lo que buscamos.

    El big data, la inteligencia empresarial o competitiva no pueden vivir sin las preguntas relevantes. Sino sabemos que queremos saber y para que, dará igual los datos que tengamos.

    saludos

  3. 3

    piedad

    Muy bien explicado. No sirve de nada «perderse» con tantos datos si no sirven para encontrar las respuestas adecuadas

  1. 1

    Cajón semanal de enlaces nº10 | Periferia Digital

    […] El secreto del ‘big data’ son las ‘big questions’ | Genís Roca […]

  2. 2

    Las grandes tendencias en tecnología y la contratación pública electrónica | Contratación Pública Electrónica

    […] dice Genis Roca en una entrada de su blog:  El secreto del ‘big data’ son las ‘big questions’ , el problema de los datos no son las respuestas que la tecnología me puede ayudar a encontrar, […]

  3. 3

    ¿ Por donde empezar con esto del Big data en la empresa?

    […] desconocemos como puede ayudarnos. Para poder sacar partido al big data en la empresa, como dice Genis Roca en uno de sus artículos, lo primero es tener muy claro que:No obtiene respuestas quién posee los […]

  4. 4

    Watson y el arte de saber preguntar - Iñaki Larraya

    […] Roca hace una interesante reflexión en su post El secreto del ‘big data’ son las ‘big questions’, sobre la importancia de hacer las preguntas pertinentes y su relación con la comprensión del […]

  5. 5

    Cajón semanal de enlaces nº10 - Marc Martí | Observaciones, reflexiones y dudas sobre la digitalización. Sobre todo dudas

    […] El secreto del ‘big data’ son las ‘big questions’ | Genís Roca […]

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *