Confirmado: el hiperespacio existe
Siempre tuve envidia de las tripulaciones de la nave Enterprise cuando el capitán Jean-Luc Picard ordenaba saltar al hiperespacio y poco después reaparecían en otro sitio que bien podía estar en el último confín de la galaxia. La misma maniobra fue usada con profusión por Han Solo en sus intentos de huir del lado oscuro de la fuerza, y siempre creí que se trataba de un recurso de los guionistas, una ficción, pero… no sólo he confirmado que el hiperespacio existe sino que además lo visito a menudo.
Cuando las naves accedían al hiperespacio desaparecían de las pantallas de radar, se interrumpían las comunicaciones, y para sus perseguidores era imposible predecir en qué punto del espacio volverían a aparecer. Y eso me pasa.
La tecnología actual hace que siempre esté conectado. Mi teléfono móvil es una auténtica central y cuando no recibe un correo electrónico es una llamada telefónica, un sms o un twitter, un mensaje en el muro de Facebook o un comentario en este blog, una propuesta de enlace en Linkedin o una retahila de nuevos contenidos en mi lector de rss. Un festival. Pero todo esto cesa repentinamente cuando subo a un avión y por megafonía me indican que apague mi teléfono móvil y cualquier otro aparato electrónico. Se interrumpen mis comunicaciones, desaparezco de las pantallas de mis amigos y entro en el hiperespacio. Nadie sabe donde reapareceré. A veces estoy 15 horas desconectado y reaparezco en Chile, Paraguay o República Dominicana. En otras ocasiones se trata de apenas una hora y reaparezco en Madrid, Sevilla, A Coruña o París. Es lo que tiene el hiperespacio, que nunca se sabe.
Al reaparecer se restablecen las comunicaciones y uno retoma el contacto con la realidad. El avión aterriza, vuelves a encender tu terminal y el mundo te saluda con decenas de nuevos mensajes pendientes de leer, una retahila de twitts y varias llamadas perdidas. Bienvenido.
Confirmado: el hiperespacio existe.
ismael
«Confirmado: el hiperespacio existe.»
Sí, pero… ¿por cuánto tiempo más? ;)
Ene 17th, 2009 at 8:20 am
Tomás Correa
Jajaja. Qué bueno el post Genís. Y cuánta razón tienes.
En cualquier caso tocas un tema muy importante y que está directamente ligado con todo este huracán que es la tecnología; el hecho de la inmediatez. Nos localizan inmediatamente, nos informamos inmediatamente, presentamos trabajos inmediatamente…
Implica enormes ventajas pero también nos esclaviza. Esos momentos en el hiperespacio son momentos de «tranquilidad espiritual».
Pero como dice Ismael, ¿por cuánto tiempo más?
Ene 17th, 2009 at 9:33 am
Jacques
Lamento comunicar que multitud de noticias llegadas del planeta Tierra nos indican que el hiperespacio está en proceso de desaparición, gracias a un artefacto nuevo que dicen han inventado los terrícolas que permitirá tener conectividad en todo momento y lugar, incluso en los aviones. Noticias recientemente decodificadas en nuestra central galáctica afirman que ya empieza a haber servicios disponibles en determinadas líneas comerciales. Nuestro fin se aproxima. Nuestros análisis prospectivos nos muestran que sólo nos quedará un reducto de vida en el espacio aéreo de un país al que los terrícolas denominan España, dado que allí estamos bastante seguros de que la implantación se hará tarde y a un precio tan ridículo que nadie podrá permitirse pagar la conexión durante un vuelo. Menos mal. Si no, estaríamos cercanos a la aniquilación.
Ene 17th, 2009 at 12:12 pm
roberasturias
Desgraciadamente, la contrapartida a la existencia del hiperespacio es una pérdida paulatina de intimidad y, en cierto modo, de libertad.
Quizás el hecho de estar más tiempo desconectados y dejar un hueco para nosotros mismos, nos vendría muy bien.
Deberíamos ganar un poco de tiempo.
Roberto
Ene 18th, 2009 at 12:13 am
Pau A. Monserrat
Puestos a divagar, el estado de incomunicación descrito se asemeja más a las no-naves del universo de Dune. Y os recomiendo su lectura. Mezcla futuro con psicología y religiosidad.
Ene 18th, 2009 at 4:46 pm
genisroca
Es cierto que cualquier día de estos podremos estar conectados en pleno vuelo, y que los aviones dejarán de ser hiperespacio. Por lo tanto, habrá que ir pensando en un inventario de sitios que todavía nos dejan acceder al hiperespacio, es decir, sitios que nos desconectan.
Se me ocurre que los túneles de RENFE todavía son ventanas al hiperespacio. Te subes al AVE en Barcelona, arranca y en cuanto entras en los túneles que sirven para salir de la ciudad hacia Madrid, zas, desconexión y acceso pleno al hiperespacio.
Podríamos hacer un inventario:
– los aviones en vuelo
– los túneles de RENFE
Nos animamos?
Ene 18th, 2009 at 6:46 pm
ricard castellet
ummm… genial post Genis!! podríamos añadir que cuando estas en un cine o en un teatro es como una «sala de entrenamiento» un pequeño stage para cuando entramos en el hiperespacio y durante unos minutos o horas disfrutamos de la incerteza de la no-conectividad… en un mundo hiperconectado necesitamos hacer saltos en el hiperespacio para poder desconectar… una buena paradoja
yes.. i want to believe
Ene 18th, 2009 at 10:05 pm
pepe sánchez
Para acceder al hiperespacio desde cualquier localización tienes que presionar el botón off de tu dispositivo.
Ene 27th, 2009 at 4:28 pm
frank axel
me emociona saber que el hiperespacio existe porque siempre e querido viajar por el.
me gusta el hiperespacio.
Nov 10th, 2009 at 11:04 pm
I.M.B.H.
es alago sin igual al entrar al hiperespacio cuando no es solo lla saben alo que me refiero seria mas bien el superespacio.
Jun 5th, 2010 at 12:33 am